Frente a la cantidad de episodios violentos ejercidos por hombres en contra de mujeres, hechos trágicos y criminales, poco lugar queda para otras situaciones menores pero no por ello menos injustas

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"...la psicopatía, la mentira

y la manipulación pertenecen a

ciertas personas, tanto hombres

como mujeres."

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Nada de espacio parecería caber en señalar que la violencia no tiene género. Que la psicopatía, la mentira y la manipulación pertenecen a ciertas personas, tanto hombres como mujeres. Porque existe una injusticia que tal nuevo tabú hoy no se menciona: la de victimarias disfrazadas de víctimas que se presentan ante la Justicia buscando apoyo para arremeter judicialmente contra personas sin prueba alguna, solo con dichos que resultan suficientes para deteriorar sorpresivamente la vida de cualquiera. Utilizando la mentira como herramienta de ataque, cuya conducta además suele ser repetitiva.​

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"Nada de lo presentado por ellos

a nivel probatorio sería evaluado

aun cuando lo aportado barriese

por completo aquellos supuestos

hechos denunciados..."

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Ante esta situación nos encontramos a su vez con una Justicia al parecer imposibilitada de diferenciar entre las auténticas víctimas que requieren de protección y medidas urgentes contra sus victimarios de quienes no lo son. Los equipos interdisciplinarios que trabajan para contener y detectar víctimas parecieran no ser de ninguna utilidad al momento de observar estas situaciones, en las cuales hacen la vista gorda y legitiman todos los discursos sin distinción.

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Esta imposibilidad a la que me refiero en potencial diciendo “al parecer”, se torna en parcialidad, ya que resuelven sobre la mayoría de los casos sin probar absolutamente nada, dictando medidas extremas de restricción basándose solo en meros dichos de la presunta víctima, ignorando las pruebas aportadas por los supuestos victimarios, en realidad víctimas de todo este desajuste judicial. Nada de lo presentado por ellos a nivel probatorio es evaluado aun cuando lo aportado barriese por completo aquellos supuestos hechos denunciados, circunstancia que solo puede ser sostenida gracias a la complicidad de Jueces que hacen caso omiso a las pruebas que se contraponen.

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Todo ello tal vez porque políticamente les sea de mayor conveniencia, pero aun así, los procesos judiciales debieran tener -en el fuero Civil- una resolución de mayor efectividad, pero en algunos casos además interfiere otro factor: el de juzgados encabezados por un feminismo prejuicioso, y su consiguiente pérdida de Justicia en detrimento del varón.

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Esta breve exposición solo pretende remarcar aquellos casos en donde todo se basa en dichos, que desde ya bien pudieran ser veraces y necesitar de respuestas inmediatas, pero así también ser maliciosamente falsos.

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"...tampoco será acertado

intercambiar machismo

por feminismo, entendiendo

a este último no como reparador

sino como nuevo sometedor."

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La cultura machista fue y aun es un hecho en sí mismo. Siendo cada vez más evidente que jamás debieron ni debieran de existir jueces atravesados por ella, ni tampoco es ni será acertado intercambiar machismo por feminismo, entendiendo a este último no como reparador sino como nuevo sometedor. Porque a la hora de tomar decisiones solo sumará desbalance al pretendido equilibrio de la Justicia.